Fatality night

Con Luli hicimos shushi, mientras esperábamos que el arroz se cociera, tomó a su perro
Poodle toy llamado, dulcemente, por mi: "perro agueonao". Y le sacó suciamente unas cosas rojas de los ojos (como lagrimas de sangre seca incrustada)... con Angelina nos quedamos mirando con los ojos desorbitados y cara de "láme water", entonces dijimos al unísono:

Guakala Luly, ¡cómo se te ocurre hacerle eso al perro si estás cocinando!, ¡por el amor a Clorinda!...¡G-u-a-c-a-l-a!. Entonces Luly respondió: ayy! si a cada rato "una" se está lavando las manos.

Entre botella y botella de vino un Ventisquero "flayte" y uno "finolis", decidíamos a donde ir. Obviamente empezamos tomando el
"finolis". Aunque según Luly "aquí en shile no hay vinos malos".


En fin, el vino y el suave y cremoso sushi se nos subió rápidamente a la cabeza, aunque a Luly se le subió como en tres segundos, y cuando está así, no hay decisión buena ni cuerda que tome, pero esta vez fue la excepción a la regla.

Bla, bla, bla, llegamos al lugar donde siempre vamos a bailar, y solo sé que me dieron un beso exquisito y me regalaron una botellita de perfume DKNY (en fin, todo ese episodio fue bcn) mas de eso no me acuerdo, ya que hoy en la mañana aun hay una gran palabra impresa con acero fundido en mi frente, que dice: "vinopiscola". o sea, si se me cae algo al suelo, y me agacho para recogerlo, simplemente ¡cagué!.

Cuando salimos del lugar "tipin" 4 AM, vi que mis amigas se alborotaron, y yo con mi cuerpo de plasticina y cerebro de "Ron cebada Heristoff" solo atinaba a mirar como estatua griega, entonces de repente me dijeron: súbete rápido al auto y... raaaan! raaaaan! Raaaaaaaaan!, nos fuimos.
Una vez dentro del auto comprendí toda "la movida tropical" sobre lo ocurrido:

UN viejo chico, flaco-desnutrido, de ojos hundidos y piel gris ajada , tenía en sus manos los espejos laterales del auto, que según él, unos "manilargos" los habían sacado y él, cual hércules, tras ellos fue corriendo cuadras y cuadras persiguiendo a los antisociales, y los golpeó con sus cuatro nudillos en la boca hasta que le entregaron los espejos.

Clara y obviamente, nadie le creyó somos un poco enfermitas para algunas situaciones, pero no weonas, así que maquinamos como pudo haber sido la verdadera historia:

The E! true Bellavista history:

Quien sacó los espejos fue el viejo CTM!, obvio sacó los dos, pero el truco del viejo ctm!, es contar esa historia al afectado (nosotras, en especial Angelina la dueña del auto) y darle una recompensa por haber atrapado a los maleantes y entregar los espejos, entonces, así se ganaría las "tres lukitas que pidió"... (ahhh! A todo esto, el viejo ponía cara de humildad, ojos brillantes y desamparo).
y entonces ahí Luly, sacó viveza desde el MUUUUUUUUUY mas allá, le quitó los espejos al viejo CTM!y le dijo: ¡anda a buscar a los asaltantes!, el viejo se da media vuelta y ahí escucho: ¡¡¡SUBE AL AUTO, RAPIDO!!! Y RUUUUUUUUUUUUUUUUUN! RUUUUUUUUUUN!


PD1: Angelina llegó con los espejos pegados con cinta adhesiva del botiquín.

PD2: felicitaciones a Luly, que siempre toma malas decisiones con copete y caramelos en su cuerpo, pero ahora la historia cambió.

PD3: a lo mejor el viejito tenia hambre y necesitaba el dinero para comer. :S
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